Mes: junio 2017
Carta de una mujer Transexual a Chimamanda Ngozi Adichie.
Leí con asombro su declaración, en la que me negaba usted la condición de Mujer.
Hablo en mi sólo y único nombre, ya que jamás he militado en formación política alguna, a pesar de mis fuertes convicciones al respecto desde muy temprana edad.
Rechazada por mi condición sexual, femenina, a los doce años, no me quedó nada.
Ni marxismo, ni Anarquismo me aceptaron, y allí quedé, sola con mis libros de Toni Negri.
Atrás habían quedado Colette y Anna Karenhina.
Sólo me restó el Feminismo, que no es cosa baladí.
Todo el sufrimiento que pasé, desde la adolescencia hasta mi madurez, me fue infligido por mi condición femenina, esto es Mujer.
Todas las agresiones físicas y sexuales que sufrí a lo largo de mi vida fueron por ser Mujer.
La social-democracia trajo a mi país, España, una “suerte de mejoras” que comenzaron allá por el inicio del siglo XXI, y que culminaron con la Reforma del Código Penal durante el Gobierno de Zapatero, en su segunda Legislatura como Presidente del Gobierno.
Aún hoy, sufro el rechazo, la cosificación sexual, y hasta la burla, por mi condición de Mujer Transexual.
Me he sentido ultrajada hasta en mi Dignidad más íntima por los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, Personal Sanitario del Estado y el Juzgado cualquiera de este país al que me presentase.
Al denunciar Delitos de Odio, por Transfobia, incluyéndome en la denuncia la apostilla “Delito de Faltas” ha sido ultrajado y conculcado mi Derecho a la Justicia como Ciudadana.
Tuve que soportar las risotadas, y hasta los gritos de burla, mientras un agente me tomaba declaración, en una Comisaría.
Esto nos sucede a la mayoría de las Mujeres al relatar ciertos hechos, pero en especial a las Mujeres Transexuales, que somos asociadas automáticamente al estereotipo de “objeto sexual de Consumo”, con una orientación unidireccional hacia la Prostitución.
Pertenezco a una minoría de mujeres transexuales, que debido a nuestra edad y la falta de Igualdad de oportunidades educativas, luchamos por formarnos, de manera auto-didacta o yendo a la Universidad.
Meros privilegios de mujer blanca europea en un sistema social-demócrata.
Desde mi posición de mujer transexual, blanca y privilegiada, pues puedo dedicarme a escribir y realizar investigación para la que estoy capacitada, le reitero mi dolor por su humillación a mi persona.
A título individual.
Una humillación más, machista y patriarcal que jamás esperé de una persona como usted.
Sólo me resta despedirme, deseando que lea, o relea, a Chandra Talpade Mohanty, una Feminista e Investigadora de India, que en 1986 reclamaba en su texto “Bajo los ojos de Occidente”, que “…las mujeres del “Tercer Mundo” deseamos ser Sujeto y no Objeto de estudio…” que es al lugar al que usted, Chimamanda Ngozi Adichie, me ha relegado al opinar sobre mi vida y mi sexualidad.
"Entrevista con Cristina Fallarás."
Durante el gobierno de Zapatero, encendí la televisión una noche, y allí estaba ella. Cristina Fallarás, descarnada y narrando su propio desahucio. Con sus dos hijos pequeños. Paredes congeladas en el interior le dieron la bienvenida a la “crisis”, a esta veterana del Periodismo con mayúsculas. Anteriormente había dirigido varias publicaciones y fue despedida, embarazada de ocho meses, entrando en la masa desfavorecida. No tuvo rubor al contar que había robado para subsistir, en la televisión, horario noble, antes de que la dejaran en la calle, nuevamente, al terminar el programa. Conocerla es encontrar al Mundo desvestido. Es la niña que señala al Emperador que va desnudo desde su crónica periodística. Especialista en Ciencias Políticas. Asomarse a sus increíbles ojos azules es entrar en una trinchera de la memoria. Hablar con ella deja epatado al más bregado, por su franqueza y su elocuente oratoria. Nos visitó hace poco, y habló con nosotras en la Librería de Mujeres, en Santa Cruz de Tenerife. En junio vuelve a visitarnos para participar en la Escuela Feminista, donde versará sobre género y clase
¿Qué opina, después de su visita a Santa Cruz de Tenerife, sobre tener que andar 7 km en bus desde el centro de la ciudad, para poder asomarse al mar?
No me cabe en la cabeza que una ciudad le dé la espalda al mar. Sólo se explica con una administración pública que “diseña” la ciudad y el espacio público también de espaldas al ciudadano. ¿Cree que se ha sustraído un espacio público de la ciudad? En sus observaciones, ¿a quién beneficia esta dejación o abandono del espacio público por el Estado o Municipio? ¿Cree que estas transformaciones urbanas se dan para alejar a la ciudadanía del diálogo y desarticular la comunicación entre iguales en la Sociedad Civil? A veces hablar de “lo público” aleja su significado, por culpa del mal uso político. Lo que llamamos “espacio público” son nuestras calles, plazas y jardines, los museos, parques y bibliotecas, las ramblas y sus árboles, las escuelas y los hospitales. Son nuestros, de todos los ciudadanos, pero no exactamente porque nos pertenezcan. Eso implicaría “propiedad”. Son nuestros porque los ocupamos y los usamos. Usarlos es imprescindible. Es nuestro deber cuidarlos y mejorarlos, en el sentido de que esos espacios también mejoren la vida de los ciudadanos. Cuando el urbanismo y la gestión política de todo ello no implica mejoras evidentes para la vida de los ciudadanos, cuando facilitan el aislamiento y dificultan la participación, podemos decir que su administración es poco democrática, cuando no antidemocrática.
¿Qué sensación le ha producido pasear por nuestras calles?
Dicho lo anterior, me enamoré de Santa Cruz de Tenerife, de sus gentes y, muy en particular, de las mujeres poderosas que conocí en mis charlas en la Librería de Mujeres. Hay algo en la ciudad fascinante ligado a su arquitectura y a los árboles. Existe una belleza en las calles de la ciudad más allá de las intervenciones públicas, que conecta el Caribe con África. En cuanto llegué, me sentí en casa. No me pasa habitualmente.
Conociendo su opinión en cuanto al “alquiler de vientres” ¿cree realmente que puede tratarse de “situaciones altruistas”, o son una excusa para mercantilizar el cuerpo de las mujeres?
Se trata, sencillamente, de una barbaridad. No puedo comprender de ninguna manera que se presente como “un debate” posible. Es, ni más ni menos, el uso del cuerpo y la vida y el tiempo y las emociones y las hormonas y la sangre de mujeres pobres por parte de personas ricas. Va más allá de la explotación, en sentido clásico; me parece un nuevo modo de colonización. Una vez colonizadas y esquilmadas las tierras, colonizan y exprimen los cuerpos. ¿De quiénes? De las mujeres, por supuesto.
Conociendo el tratamiento de la violencia de género por parte del Gobierno de Rajoy, y también de la Justicia, en nuestro país, ¿qué herramientas le quedan al Feminismo para proponer soluciones a este grave asunto? ¿Apuesta por la desobediencia civil?
Yo soy una firme partidaria de la desobediencia, póngale el adjetivo que mejor le venga. Obediencia, sacrificio, caridad, silencio, etcétera son valores católicos que me repugnan, y cuyos frutos, para las mujeres, son la violencia y la sumisión. Hace ya un tiempo que pienso en este asunto de forma radical: El feminismo, cierto feminismo, se planteó aspirando a “ocupar espacios”. Creo que ya no quiero ocupar esos espacios. No quiero recibir sus premios, aparecer en sus listas, participar en sus jerarquías. No sé qué podemos hacer. Yo, por lo pronto, me narro. Es un paso fundamental.
«Nada de lo que estamos viviendo con horror estos días habría sido posible sin la participación activa y satisfecha de los medios de comunicación. Ellos son los responsables del “relato” que hurtó a la ciudadanía la realidad de lo que estaba pasando: silencio, corrupción, robo, oligopolio y destrucción minuciosa de algo que llamábamos “estado del Bienestar”.
Mi madre es una mujer de 83 años votante de la única izquierda que ha existido desde la Transición hasta la aparición de “Podemos”, un fenómeno político que ella no entiende y le asusta. ¿Deben los Medios de Comunicación cambiar su estrategia de demonizar, o “Podemos” debe elaborar un discurso dedicado a esta población, mayoritaria en nuestro país?
El problema de la izquierda de su madre es que pactó la Transición, y también que un hombre llamado Santiago Carrillo se definió “juancarlista”. El problema es que tanto esa izquierda como los sindicatos participaron, por acción u omisión, del pacto de silencio que mantiene llenas fosas y cunetas, y en no pocas ocasiones, del reparto de lo robado a los ciudadanos. En cuanto a lo otro, los medios de comunicación demonizan a Podemos porque están construidos por el poder, para el poder y sobre el poder. Hablo del poder financiero, que ya es el único que existe. Nada de lo que estamos viviendo con horror estos días habría sido posible sin la participación activa y satisfecha de los medios de comunicación. Ellos son los responsables del “relato” que hurtó a la ciudadanía la realidad de lo que estaba pasando: silencio, corrupción, robo, oligopolio y destrucción minuciosa de algo que llamábamos “estado del Bienestar”. De la Cultura ya ni hablo, porque nadie recuerda lo que era, llegado este momento político.
¿Cree que es posible plantear una reforma de la Constitución de 1978 y llevarla a cabo con éxito? ¿Monarquía o República?
La monarquía es un sistema podrido y feudal, una construcción de súbditos para súbditos. La nuestra, además, forma parte de una dictadura criminal. Sobre la reforma y su éxito, es cuestión de tiempo: siguen vivos y en los puestos de poder los franquistas y sus herederos, los hijos del miedo y la ignorancia… Ese es nuestro mayor problema, la ignorancia. Hace poco oía a algún escritor referirse al Lazarillo y la picaresca para describir la ineluctabilidad de la corrupción y la barbarie en España. Puede ser. Sin embargo, yo recuerdo algunos pasos en la II República, y aun antes, la Institución Libre de Enseñanza. Pero es cierto que todo lo que veo me lleva al desánimo.
¿Estamos en disposición de ofrecerles contratos laborales a las mujeres que deseen abandonar la prostitución, contemplando el marco laboral actual, y las futuras reformas exigidas por Bruselas?
Nadie quiere ofrecerles contratos laborales a las mujeres que deseen abandonar la prostitución. Es más, nadie quiere que las mujeres abandonen la prostitución.
¿Cree que la transformación del ordenamiento urbano, que comentábamos en una pregunta anterior, responde a un plan ideológico para desarticular la capacidad de reunión y manifestación de la Sociedad Civil?
Dudo sobre lo que usted llama “capacidad de reunión y manifestación de la Sociedad Civil”. Dudo que sea necesario “un plan ideológico” para desarticularla. No se puede desarticular lo que no existe. De eso ya se encargó el PSOE hace más de dos décadas.
“La Revuelta de la “Chibata”. Brasil-1910.
"HOSPITALES DE DISEÑO"
Vaciados de profesionales de la Sanidad, por más de una década de recortes feroces, los hospitales públicos del “Sistema Canario de Salud” (SCS), agonizan.
La isla de Tenerife contaba con dos grandes hospitales de referencia que eran el orgullo de pacientes y profesionales del área. No era “Shangrylá”.
El nefasto ejercicio como Consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, la actual Delegada del Gobierno en Canarias Mercedes Roldós (Partido Popular), vació de contenido, medios económicos y personal al “Hospital Universitario de Canarias” (H.U.C.) para dejarlo en un semi-ambulatorio, a nivel gestión y dotación.
El H.U.C. ha sido a lo largo de la historia de Canarias, referente de modernidad en materia de trasplantes, y aún hoy trata a pacientes de todo el archipiélago, poblado por 2.144.648 personas.
Se desplazan los pacientes, vía aérea o marítima, con cargo al erario público, por el nulo desarrollo de los hospitales insulares de las llamadas “islas menores”, hacia las “islas capitalinas”.
Con la apertura del “Edificio de Actividades Ambulatorias”, año 2010, e inaugurado hasta en cuatro ocasiones, con claros fines electorales aunque vacío de mobiliario… Presidente del Cabildo de Tenerife, Presidente del Gobierno Autónomo fueron a fotografiarse y llevaron su televisión autonómica. Este evento, significó la decadencia total del H.U.C. como Hospital, trasladándose la mayoría de las partidas económicas al “Hospital Nuestra Señora de la Candelaria”, al que se le dotó de la “U” de universitario con éste fin.