«No se puede descolonizar sin despatriarcalizar», María Galindo y reflexiones desde la orilla africana dónde comenzó la Conquista.

Uno de los Debates entre Mujeres que nos pasan por delante versa sobre el Velo Islámico, sí o no.

En las Redes hay posiciones agresivas de los dos lados, e incluso un debate teórico entre Feministas Islámicas y Feministas Laicas, que declaran que «el feminismo islámico es un Oxímoron».

Leía ayer un artículo sobre las alianzas de la derecha estadounidense y los conservadores musulmanes, “por ser considerados útiles en futuras guerras culturales».

¿Se acuerdan de aquel esperpento político de Zapatero titulado «Pacto de Civilizaciones» posterior a los Atentados del 11-S en New York?

Una década más tarde nos encontramos con que la Ultraderecha española ha sido financiada por un sector de la oposición iraní.

Lo que se defiende entre nosotras, no estoy sola en esto, es la Libertad contra la Prohibición de Velos o Burkinis en Francia, y la de cualquier Mujer que, por decisión propia, decida abandonar el uso del velo, practicar el Nudismo o conservar la norma de etiqueta islámica y practicarla.

No soy una persona religiosa, pero tampoco dejo de reconocer que «provocar a sociedades ultra-conservadoras«, como me respondió Nadia Yassine en debate público, exigiéndoles actitudes y normativas, que incluso en nuestras sociedades «democráticas» son fuertemente cuestionadas, como el matrimonio igualitario o la visibilidad LGTBIQ+, «burbujas de derechos» que son rápidamente suprimidas en cuanto el péndulo Neoliberal gira hacia la Ultraderecha.

Propongo ante esto el Terrorismo de Género, a la inversa; siempre he defendido que no tener una identidad muy definida es quitarles el suelo de debajo de los pies a los «etiquetadores, sexadores” y gentes que nos obligan a definirnos, ante la incerteza de sus propias identidades, queriendo construir una Otredad poscolonial para calmar sus fobias e incertidumbres.

Nuestra Brújula debe ser el Patriarcalismo de las Religiones, sus Rituales y las culturas devenidas como explica perfecta y «contradictoriamente» en su texto María Galindo, de «Mujeres Creando» de Bolivia, «No se puede Descolonizar sin Despatriarcalizar«.

Podemos ver con claridad los problemas económicos de la República Islámica de Irán, causados por embargos, sanciones internacionales y la corrupción dentro del aparato del estado teocrático, denunciado por las Mujeres en sus calles.

Observamos los problemas que han causado al Vaticano, otro estado teocrático, los casos de corrupción económica graves durante más de 40 años, mientras continúan pontificando sobre el Aborto.

Aquí reflexiono con la propuesta de María Galindo para aclarar que, la Alianza entre Patriarcado y Capitalismo nos ha mostrado su última excrecencia, el Neoliberalismo, que impera en Irán, Arabia Saudita, Bolivia y Chile.

Todo a las espaldas de los Cuerpos de las Mujeres, las Cuerpas, pues es con la Negación del Valor de nuestras Vidas, Conocimientos y Trabajo que se fabrica la Opresión diaria del Planeta.

Concluyo esta reflexión contándoles que en el Islam está «prohibida», es «Haram«, desde su fundación la Usura y los bancos deberían seguir la norma islámica, «Dawa«, que contempla no cobrar intereses por el dinero prestado, y que la Iglesia Católica tiene su base en la Pobreza, ya que su fundador aborrecía a los Ricos y expulsó a los Mercaderes del Templo…

Añado una pequeña nota ante las críticas al texto de dos feministas chilenas «porque no critica al Judaísmo y va en la línea de Edward Said». El Cristianismo y el Islam vienen a Reformar el Judaísmo y el Islam es la última expresión monoteísta que se considera una total renovación de las Religiones del Libro, por lo que comparten. Me alegra ir en «la línea de Edward Said», pero el texto de referencia es de María Galindo y el Colectivo «Mujeres Creando», activista, escritora y cineasta y radialista boliviana, suerte la próxima vez.

Fotografía «Figura Femenina en Madera» prehispánica, hallada en «Juan Grande»-Museo Canario, Las Palmas de Gran Canaria

La Voz Equivocada.

Lanzaba días atrás una miembra del Consejo de Estado del “Reino de España”, tras prologar un libro que versa sobre “las maldades de las gentes transgénero y otras variedades/diversidades”, a veces vulgo “queer”, la idea manida del “Cuerpo Equivocado”.

No me extenderé sobre este asunto pues pueden revisitar ustedes la polémica en los “diarios” y “redes sociales” españolas.

En mi charla cotidiana con una persona de mi intimidad, comentando este y otros avatares de nuestra maltrecha vida, sumen pandemia y guerra, surgió la “voz equivocada”. Excluyan nuestras vidas que son de lo más rutinarias, y en las que a ambas nos gusta especialmente el sonido de los gatos cuando beben agua en completo silencio.

Y sí, nuestras “voces equivocadas” no tienen nada que ver con el género ni el sexo, más bien es con la cuestión de Clase, que ya sé que les aburre por “dogmática”, poco o nada “nihilista” y todos los demás adjetivos que se atribuyen hoy día al análisis marxista de la sociedad.

Mi bisabuela y mi abuela, también mi madre, eran “voces equivocadas” hablaban y no se las tenía en cuenta. Tuvieron hijas e hijos con “voces equivocadas” de pobres, y nietas bisnietos y tataranietas con “voces y cuerpos equivocadísimos” una vez superadas las hambrunas de cada época pasada.

Nosotras ya no teníamos hambre. No nos gustaba comer. Y seguíamos siendo Pobras. Las “oscuritas” de un país que lleva el Racismo en el ADN.

Queríamos devorar el mundo y la vida, pero, de nuevo vivíamos vidas equivocadas, en países equivocados, con sociedades completamente equivocadas en las que el Poder siempre residiría fuera de nuestro alcance.

Nuestra idea equivocada de la igualdad, del justo reparto de la riqueza, y de la conciencia de grupo, de formar parte de algo superior a nuestra individualidad, no cabía en “Instagram”.

(Inserte aquí su escaso conocimiento de la Obtención de la Plusvalía, acuñada por Karl Marx, si fuera mucho escriba su propio artículo)

No queríamos debates que habíamos perdido de antemano, y nos limitábamos a analizar, por nuestra sanidad mental, los acontecimientos.

Nos asaltó el “logro” de que una joven transgénero fuese operada de la voz, para así dejar de sufrir el oprobio, los insultos y agresiones contra su “cuerpo equivocado”.

Lo comenté con dos personas transgénero de mi edad, entre 40 y 60 años, y una me dijo que la cuestión de la voz equivocada era transfobia, y la otra se sorprendió por la alegría que le había dado superar ese trauma y aceptar su voz, equivocada, y cuanto placer personal le proporcionaba este logro.

Todo se silenció por el “bien del Pacto de Izquierda” y la amenaza de la “llegada del Fascismo” al gobierno.

Un Fascismo que subyace desde antes de la Esclavitud atlántica, que reside en el Poder profundo, el real. El Dinero.

Siempre dará igual que te hablen de “democracia” una versión del esclavismo de la Grecia clásica transportado hasta el carrito de tu supermercado, regado con dioxina, cáncer y huesos de años ruines.

Huesos que arrastran siglos de hambre y de maltrato, de trabajo forzado, de partos en condiciones precarias, de tu bisabuela y la mía.

No te preocupes, siempre encontrarán algo equivocado en ti y en tu vida.

Nunca serás lo suficientemente rubia o blanca, occidental o de buen apellido, regado con una buena herencia.

Lean el Capítulo dedicado al Fascismo y al Totalitarismo en sus manuales de Ciencia Política, allí encontrarán poca información, muy difusa y en un lenguaje hecho incomprensible, a propósito.

Será lo único que les vuelva a repetir que sus voces están equivocadas, que viven ustedes en cuerpos equivocados, que hay que “desahuciarlas” de sus techos, porque eligieron ustedes una posibilidad equivocada.

Esta voz equivocada les da la bienvenida al caos programado. Adivinen por quién.

Barracón.

Cuando mi madre era pequeña, nacida en 1934, vivió en un barracón de maderas construido por su padre, un hijo de agricultores que huyó de la sequía y de la Guerra de Marruecos.

Mi madre, apenas una niña tenía que cargar agua en la cabeza, antes o después del colegio, para abastecer la casa-favela.

Sólo tenía un vestido y le cortaban las puntas de los zapatos, para que le cupieran los pies.

Vivían en los terrenos de un Falangista que dio trabajo a mi abuelo en un cine, dónde mi abuela regentaba la “cantina” sin saber leer ni escribir.

Todo estaba supervisado por la familia falangista que vivía no muy lejos y que controlaba todo con ojo de hierro.

Aparecieron por aquellas huertas un bando de familias gitanas húngaras, huyendo del Genocidio Nazi de la 2ª Guerra Mundial, y la Favela iba aumentando.

El lugar de encuentro de todos era el Cine, para ver películas o bailar, según el orden del Falangista propietario.

Y así andando el tiempo, fuimos a vivir a las Barriadas que construyó la Dictadura asesina de Franco, lo que mi madre consideraba “un progreso”, pues al menos no tenía que cargar agua, aunque la cocina fuese de carbón, ya entrados los años 50.

Desde que nací me crie en esa casa, que siempre consideré la misma favela, sólo que con paredes de adobe en vez de maderas clavadas.

Andando los años nunca me abandonó aquel sentimiento de saber de dónde vengo, y crecí con un fuerte sentido de “Favelada”, por mucho eufemismo que se usara para las casas baratas de las Pobras.

Siguieron corriendo los años y se acabó la Dictadura asesina de Franco, pero seguimos relegadas a la misma condición, sólo mejorada por la devaluación de la moneda y el automático aumento de los salarios.

A finales de los 70 inicios de los 80 nos mudamos a otra “Favela” más moderna, en la que se incluyeron a las “familias evacuadas del Sáhara Occidental” al abandonar la colonia de manera precipitada, inaugurando la “democracia”.

La modernidad trajo el desarraigo y la destrucción del sentido de Comunidad que mi madre tuvo con aquellas gitanas húngaras.

El “Progreso” se convirtió en dinero, coches y bienes de consumo, como fuera, incluso robando.

A mi padre se le retiraron los “beneficios” de la devaluación, y fue despedido porque ganaba más de antigüedad que de salario, y la “Reconversión Industrial” de Felipe González nos devoró.

A los 16 años, en 1982 la misma noche en que el PSOE ganó las Elecciones por mayoría absoluta, llegué a Madrid dónde me convirtieron en Puta Infantil, oh dónde diablos andaría la Ley del Menor en aquella catástrofe.

Y llego hasta hoy, donde sigo siendo orgullosamente “Favelada”, en completa soledad porque el resto de la Favela se considera Clase Media.

Lo cuento porque si no se habla, se entra en Depresión…

Sin más me despido, por ahora.

“…Yo también soy lo oscuro de la noche…” Clarice Lispector.

Alagoas

 

Como si de atravesar el Polo Norte en soledad se tratase, emprendió ella la vida en solitario.

Una soledad rica, llena de amistad, mapas, libros y animales.

Quién sabe si su mayor defecto fue ese, considerarse un animal más, lejos de pretensiones pensantes que teorizan vidas ajenas.

A duras penas comprendía la suya, cual detective que se lanza a la caza de sus múltiples errores y defectos.

A la inexorable esclavitud de respirar y comer, que algunas gentes llamaban “privilegio” era imposible sustraerse.

De su respeto por saber mantenerse en segunda fila, sin hablar en nombre de nadie, empeñada en una colectividad imprescindible, jamás se hablaba.

Ese empeño en resaltar los defectos y carencias ajenas, que la sabiduría milenaria había descrito con esmerado detalle, ese minusvalorar el esfuerzo ingente que hacemos todos los seres por seguir la senda marcada el día que nacimos.

Las infinitas posibilidades de intentar ser mejor, de dialogar, aprender de la colectividad.

Ni un solo ser del amplio catálogo de especies e instintos, ni uno sólo, era tenido por menos en su apacible vida.

Sí, hasta eso aprendió, la alegría y la ilusión que trae la Paz.

Una Paz “que te hace permanecer vigilante”, según la sabiduría de María Zambrano; para que la Paz se consolide y sea continua.

Ese merecido descanso de haber dado lo máximo de una misma para que la Verdad “conmueva hasta a los más tercos e imposibles de conmover de todos los seres”.

Discúlpenme si no puedo más, si la vida me obliga a pararme, observarme y cuidarme, “porque yo también soy los oscuro de la noche” como decía mi querida Clarice Lispector.

 

Ilustración y texto originales de la autora, todos los derechos reservados.

 

Joumana Hadad. “Supermán es árabe. Acerca de Dios, el matrimonio, los machos y otros inventos desastrosos.”

No pretende, en este ensayo magistral, Joumana Hadad (Beirut, 1970) que destruyamos a los hombres árabes, ni desea que odiemos a nadie. Pareciera, al contrario, un manual para hombres y mujeres machistas que son víctimas de su educación, tabúes, y credo religioso. Nos relata en clave de sociología de género, pero esta vez humano, las diferencias entre dos lados de la sociedad que a su parecer deberían incluir muchos más, inaugurando un ejercicio refrescante para el debate de “como deseamos que sea nuestro mundo”.
Una sociedad plural, y no binarista, que incluya otras sexualidades legitimándolas y no tolerándolas, que, según Hadad, en el Líbano contemporáneo se encuentra en el Paleolítico. Nos regala un análisis político del Monoteísmo, majestuoso, que les devuelven alas a las mujeres, para volar directamente a pagar sus rentas y sus gastos, haciéndolas libres de una vez para siempre. Es la independencia económica femenina la que libra a las mujeres de hombres que paguen sus rentas a cambio de someterlas, y a estos de mujeres ávidas de quién pague sus cuentas, estableciéndose una nueva relación entre ambos que abandone la noción de “las cavernas”, en palabras de Hadad.
Analiza en profundidad el estado de la Democracia en el Mundo árabe, y más concretamente Oriente Medio, para llegar a la conclusión de que no existen los Derechos Humanos ni las libertades allí. Un paseo por cifras estadísticas demoledoras sobre los matrimonios de niñas en los países árabes y demás testimonios de hombres y mujeres que se sienten impotentes para contar, incluso a sus familiares y amigos más próximos, sus ideas acerca de la igualdad de los sexos.
Haciéndonos un Tour por la Virginidad, la ablación del clítoris femenino y el Feminismo islámico, que no sale muy bien parado, nos reconduce a la secularización de la sociedad y de la vida, librándonos de la pesada muela del Monoteísmo. Su vivencia de la monogamia, y de la poligamia al vivir en un país árabe, son cuando menos muy esclarecedoras, y su visión comparativa con la sociedad occidental deja en equilibrio el sometimiento de todos a un modelo único y patriarcal.
Nos relata como el Feminismo “de tercera generación”, esto sería “post-feminismo de la Liberación de la Mujer” de los años 70, nos conducirá, debe conducirnos, al entendimiento, y a proclamar una Revolución en la que los roles no sean el de Supermán y la mujer sumisa.
Recorre la ensayista y poeta libanesa la historia y la formación de la sociedad árabe, sea musulmana, cristiana o judía, incluso de las llamadas “Primaveras árabes”, hablándonos en clave de poema, construyendo un corpus muy novedoso en su último libro, que da paso a una lista de deseos y contra-deseos, para entrar de lleno en la cuestión de la convivencia, pacífica y sin sometimientos, de la sociedad humana, traspasando con ello los límites del mundo árabe para adentrarse en la sociedad global.
Finaliza su trabajo con una misiva a sus propios hijos deseando que se conviertan en “hombres de verdad” y no en “Supermen” que condenen a sus mujeres, hijos e hijas, a los roles patriarcales que tanto sufrimiento aportan a las vidas de hombres, mujeres, homosexuales, lesbianas y transexuales, y en definitiva a la convivencia humana.
Trabajos como este, serios y de una rigurosidad científica digna de las mejores investigaciones nos ayudan a profundizar de manera antropológica en la vida humana y su descripción, con la base en un conflicto, para seguir la Teoría Sociológica a la perfección.
SupermanEsÁrabe
Joumana Hadad. “Supermán es árabe. Acerca de Dios, el matrimonio, los machos y otros inventos desastrosos.”
Ediciones Vaso Roto. Colección “Umbrales”. 2014.

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Las Palmas de Gran Canaria, ¿Intervención Social?

SantaCatalinaPlayaChica.

Ayer visité el deteriorado sector de “Playa Chica”, sito entre el Parque Santa Catalina y la Playa de Las Canteras.

Como ven en la imagen es un amplio sector urbano, con muchas calles antiguas, dónde se ubicaba la zona de Ocio por excelencia, restauración y Turismo entre los años 1960 y 1980, en Las Palmas de Gran Canaria.

Zona cercana al Puerto de la Luz, en su cara Este era frecuentada por marinería, tropa militar del cercano Arsenal Naval de Las Palmas, y turistas norte-europeos que se alojaban en Hoteles, y edificios de Apartamentos cercanos en el límite Oeste, la Playa de Las Canteras.

Se produjo un deterioro de la zona, que fue evolucionando a peor tras las sucesivas alcaldías del Partido Popular, y el traslado del Ocio, Turismo y hasta de la Prostitución a zonas del Sur de la isla de Gran Canaria.

Miles de locales comerciales cerrados, deteriorados. Apartamentos que se reformaron en una primera Gentrificación, para convertirse en viviendas, que compartían espacio con Hostales y Pensiones, residuo de la época en la que se alojaban allí marinos de remplazo y gentes de variado origen.

Hubo una época en la que la principal arteria que conecta Santa Catalina con el interior del sector, la Calle Ripoche era intransitable, con coches de policía, y motocicletas, instaladas de manera fija debido a la inseguridad, drogadicción y a lo cercano de zonas de Prostitución como la Calle Franchy Roca.

La situación actual de este sector es de miseria económica, sólo sobreviven pocos negocios en muy pocas calles, transitadas por personas Sin Techo, drogodependientes, y a quienes no se presta atención.

La informante clave de esta observación participante es E. mujer de mediana edad, con un hijo de 30 años, divorciada y dependiente de pequeñas contrataciones públicas para limpieza de Barrancos y zonas deterioradas de la Ciudad, imagino que a cargo de algún Programa de Inserción del Municipio, a cargo de las Unidades de Trabajo Social de Zona.

Declara que accede a ayudas al Alquiler y mantiene cierta independencia. Se declara dependiente del alcohol, y narra episodios de Depresión, tratados y medicados por el Sistema Público.

De su mano voy recorriendo el Barrio y me va señalando a otras mujeres de misma edad o un poco mayores, con situaciones graves de diferentes patologías. Las conoce por su nombre, a todas.

Va señalando a la joven que “se ha recuperado desde que está casada con “un moro”…

Al vendedor de cupones de Lotería que lleva un pan en bolsa plástica en un bolsillo.

Señala de otro joven que pasa, que “te mete en un lío del que no sales más”, mientras dice que “aquí te invitan pero a Heroína o Cocaína, y yo sólo bebo Cerveza”.

Me habla de hombres que le ofrecen situaciones de Prostitución, que rechaza.

Declara M. que, “la antigua «Pensión Rayo” la lleva ahora una cubana, y allí están pagados por el Ayuntamiento) malviviendo muchas personas Sin Techo que padecen la suciedad, insectos y enfermedades que se albergan en aquel edificio viejo y muy deteriorado”.

Y pregunto, si esta es la respuesta de un Consistorio de una Ciudad con mayor número de habitantes que Bilbao, a un problema que la Unidad consideraría “Integración Social”.

Las Palmas de Gran Canaria tiene 378.324 (2016) habitantes (Fuente “Eurostat”, Naciones Unidas).

Hablamos sólo de un sector muy pequeño de la Ciudad, si consideramos la extensión del Municipio, al que se le prestan unas ínfimas “medidas paliativas” para “Pobreza Cronificada”, que nada aportan a la real integración de esta gente. Coloco entre comillas los eufemismos técnicos con los que estas personas son calificadas por los organismos de Atención a esta población.

En este «barrio» conviven gentes de muy diversas nacionalidades, africanas, orientales y latinoamericanas.

El Presupuesto de la Corporación Municipal para 2018 fue de 435.057.271 euros para gastos y 470.227.765 euros en el capítulo de ingresos, sumando las Cuentas del Ayuntamiento y todas las sociedades municipales.

Para el ejercicio de 2019 se aprobaron unas Cuentas con una partida de 496,7 millones de euros en el capítulo de ingresos del consolidado y 469,5 millones en el de gastos.

Mientras se invierten miles de millones en construir obras de infraestructura viaria para integrar una empresa privada como es “Poema del Mar”, un acuario situado justo al borde del Parque Santa Catalina, de capital y titularidad privadas.

PoemaDelMarfue Este «acuario» subvencionado por un Proyecto de la Unión Europea, al que el Ayuntamiento suma una gran partida presupuestaria para infraestructura vial e intervención en los alrededores de dicho “Aquarium”.

Y allí siguen esperando, las personas Sin Techo a menos de 500 metros de semejante obra faraónica, a que les construyan un “Poema a la Vida Digna”. Un Ayuntamiento que se coloca la medalla de ser “Progresista”, que repite Pacto de Gobierno entre el P.S.O.E. y Unidas-Podemos, por otros cuatro años.

Ayuntamiento de Las Palmas, Presupuesto-2018.

https://www.laspalmasgc.es/es/ayuntamiento/prensa-y-comunicacion/notas-de-prensa/nota-de-prensa/El-Pleno-aprueba-el-presupuesto-2018-que-permitira-al-Ayuntamiento-y-sus-sociedades-destinar-mas-de-855-millones-a-inversion/

Presupuesto-2019.

https://www.eldiario.es/canariasahora/politica/Ayuntamiento-Palmas-presupuesto-historia-millones_0_864414214.html

“Poema del Mar” Aquarium.

https://www.poema-del-mar.com/

 

La mujer saharaui, la política y la Historia.

aminetu-haidar JulioCastro2009
Aminetu Haidar, foto Julio Castro-2009

Ayer se dieron a conocer el nuevo Consejo Político del Frente Polisario, el nuevo Gobierno y los nombres de los, y las, gobernadores/as de las diferentes Wilayas, administraciones provinciales.
Yo misma, y mucha más gente preguntamos ¿No hay mujeres? Rápida y amablemente nos fueron informando de que sí, hay varias mujeres Ministras en el Gobierno, y también varias Gobernadoras.
No faltó el comentario del resentimiento, “no hay mujeres porque son unos machistas”, que, por lo que leí, fue el único hombre que me respondió, según mi opinión desde algún resentimiento personal.
La mujer saharaui ha dado varios saltos en al menos tres paradigmas sociales, que yo conozca. Uno fue el de antes de la conquista española y francesa del territorio, que históricamente abarcaba desde Tindouf, actualmente Argelia, hasta el Tiris, actual Mauritania.
Esta era la zona que las tribus nómadas atravesaban en tiempos muy pasados, en pos de agua, pastos o lluvias para la agricultura.
Pasar de este paradigma social, tribal, establecido según reglas ancestrales, a la llegada de los europeos, a otro, en el que fueron obligados, por las circunstancias o en la búsqueda de un sueño de sedentarización muy anhelado, fue un choque importante para el pueblo saharaui que conoció el desprecio con que fueron tratados por los extranjeros en su propia tierra.
Las mujeres pasaron de ocupar un puesto central, y hasta imprescindible en el orden tribal nómada, a un papel secundario, impuesto por la cultura europea.
Más tarde con la descolonización, y la obligada huída hacia los Campos de Refugiados, las mujeres vuelven a tomar el lugar central que habían ocupado de siempre en su cultura, como médicos, enfermeras, periodistas o incluso integrando el Ejército del Frente Polisario. Muchas Secretarías Políticas integraron mujeres y fue creado el Consejo de Mujeres Saharauis.
El Frente Polisario tiene su origen político en el socialismo democrático, y este a su vez debe estar acostado en la tradición tribal y la religión musulmana. Observando en un plano general la política del Mundo árabe, esta asociación es muy frecuente, e incluye a la mujer en la vida social, política y religiosa.
Muchas veces se “exige” al Pueblo saharaui que reaccione como un Estado formal, cuando su realidad de pueblo exiliado a la Hamada argelina, les obliga a responder con los recursos de que disponen, escasos y en su mayoría debidos a la solidaridad internacional. Esta “exigencia” alcanza puntos de conflicto abierto, cuando se nombra a las “mujeres saharauis”. Muchas son las voces que desde Occidente, incluida la mía en ciertas ocasiones, preguntan ¿Qué opinan ellas? ¿Hay Ministras? Y las mujeres, y hombres, del Sáhara responden con amabilidad, aclarando porque a ellas no les atrae la participación en la Política o los puestos de responsabilidad. Imagino que a muchos hombres saharauis tampoco les interesa seguir esta senda de responsabilidad política, de responder con habilidad ante la exigencia de una sociedad en guerra desde 1975, con muchísimos y variados conflictos sociales, y necesidades urgentes.
Se alzan voces que calumnian al decir: “se ven Burkas en Tindouf”, la sociedad saharaui se ha “radicalizado” queriendo sembrar la sospecha de que se han transformado en integrantes del Yihadismo, en una estrategia mediática esgrimida por el invasor de su tierra y sus defensores europeos y norteamericanos.
Desde Europa les pedimos a las mujeres saharauis que actúen como ni siquiera nosotras aquí podemos actuar, y no creo que hayan mujeres asesinadas por el machismo en Tindouf, por poner un ejemplo.
Se enfrentan las madres saharauis al dilema de enviar a sus hijas a Europa, por cuestiones de salud o simplemente por obtener unos estudios, y que estas no quieran más tarde regresar a los Campos de Refugiados, en los que hay hasta 50ºC de temperatura y todas las deficiencias de no vivir en una ciudad, pueblo o país en paz. Y aún así siguen en pie, cantan, gobiernan Comunidades, ejercen sus profesiones, son Embajadoras y vuelven a ocupar el centro de la sociedad.

Articulo originalmente publicado en «El Confidencial Saharahui», en 2016

Por qué me sumo a la Huelga Feminista del 8 de Marzo.

Las huelgas son, desde los inicios del movimiento de las obreras, armas de combate contra el Poder ejercido en contra de los derechos y contra las Opresiones.

Las mujeres hemos usado ese Derecho a la Huelga desde hace siglos, para reivindicar y conseguir objetivos que iban a favor de todas las mujeres, combatiesen o no.

El Derecho a una jornada laboral digna y bien remunerada, el Derecho al voto femenino lograron objetivos para el conjunto de las mujeres, aunque sólo las que íbamos a la vanguardia de la lucha recibiéramos los palos, mujeres quemadas vivas ante reivindicación de aumentos salariales, y mujeres que quedamos señaladas para siempre por el Poder opresor, o por síndrome de stress post-traumático, después de recibir tortura, vejaciones, humillaciones y violaciones para callar nuestras voces.

Me sumo a la Huelga Feminista del próximo 8 de Marzo, por ideología política, sí esa que hace que muchas mujeres que se han beneficiado de nuestra lucha, para ejercer hoy día sus profesiones, nos rechacen, y digan que “no apoyan la politización del 8 de Marzo”, pues ellas preferirían que les regalasen flores enviadas a sus redacciones de televisiones o despachos de diputadas.

Lucho por las mujeres indígenas que se unirán a la Huelga desde Chile, las Mujeres Mapuche.

Lucho por las Mujeres Sin Tierra de Brasil, que pagan con su vida el hecho de ser pobres en un país en el que la Tierra es una conquista que ellas pagan con sus vidas, las de sus maridos, hijas e hijos.

Lucho por las hijas de las Mujeres, para que hereden una calle segura, en la que poder transitar sin miedo a cualquier hora del día o de la noche.

Lucho por cada Mujer ambientalista asesinada en las naciones hermanas de Latinoamérica.

Lucho por una Revolución, la Feminista, que será tan o más grande que las revoluciones del siglo pasado.

Lucho por cada mujer asesinada por decir “no”, “ya basta” o “a mí no me pegues más”.

Lucharé siempre por las Mujeres de los Barrios pobres, para que puedan alimentar sus vidas y las de sus familias con salarios dignos y Derechos Humanos garantizados, sea en India o en Egipto.

Lucharé toda mi vida por la Libertad de que cualquier Mujer pueda ser nudista o usar velo.

Pero, lo más importante es que lucharé siempre por un Mundo sin Egoísmo, al que podamos acceder por igual a la Educación, al Amor y a la Ciencia.

La Honestidad y generosidad de tantas Mujeres que cayeron en ese combate, para que todas fuéramos un poco más Libres y más Iguales, cada vez, serán mi escudo y mi insignia.

Jamás cejaré en mi empeño de luchar para que no haya Mujeres secuestradas por la Trata, Mujeres obligadas por la opresión a prostituirse.

Iré a la Huelga para que no colonicen nuestros cuerpos convirtiéndonos en incubadoras humanas para bolsillos burgueses.

Y personalmente, Lucharé para que las Mujeres Transexuales no vean secuestrada su actividad y pensamiento político, siéndoles sustituidos por cirugías, documentos y trabajos mal remunerados, disfrazados de “integración”, pues no nos falta ningún pedazo que pueda sernos dado para vivir en Libertad.

LOCURA.

 
Carolina Rodrigues
 
 

Muchas veces observo en silencio.
Los Modelos.

 

Ya sé cuáles son los modelos cosificados que se van a dar en una interacción social.
Soy vieja. Tengo cinco mil doscientos años.
Veo como se acercan los chicos a la mesa de las chicas.

 

Veo como se me toma como “modelo”.

Tengo “seguidores”, miles de “me gusta”.

Colecciono puntos en Portugal por mis excelentes fotografías.

Soy leída, la gente observa mis dibujos.

 

Al final de los tiempos estoy sola.
Sólo una mujer. Madura.
En todos los sentidos.
Me gusta serlo. Sólo quería ser esto.
Un engaño enorme ha flotado entre mi ser verdadero y el modelo social cosificador, que me ha querido colocar en un puesto u otro.
Siempre los he rechazado y eludido, con un pretexto u otro, escurridiza, áspera y bella serpiente.
Antes por mi juventud, mi inexperiencia.
Ahora, porque ya sé el resultado de la jugada.
No juego.
Detestada por mi inestable e incoherente opinión política.
Así debe ser la Política, está viva y es ineludible, basta abrir los ojos a la mañana.

 

Dicen que no soy, “porque disfruté de mis prerrogativas masculinas” durante una dictadura militar que acabó cuando yo tenía ocho años.
Dicen que “no puedo ser Feminista”.

 

España.

 

Ahora, colecciono secretos inconfesables que me hacen insoportable la convivencia y el amor con hombre ninguno.
No todos son negativos.
La mayoría sí, y mucho me temo que no tienen solución.
La grandísima mayoría.

 

¿No es la mayoría la Democracia?

 

Me descubrí portuguesa emigrando.
Me distancié del África Colonial española dónde me crié.
Mi verdadero ser comenzó a aflorar a los treinta años.
Brasil me lo regaló.
Gracias.

 

Hoy, soy tomada como excusa para sortear asignaturas.
Tomada por ingenua, cuando pretenden que llamarme “comunista” sea un insulto.
Lo es, a la inteligencia.

 

Mi única guía contra cosificaciones, mutilaciones y traumas: la inteligencia.
Lusitana, islámica, verdadera inteligencia. Sin fascismo. Comunista irreverente, fan de Al-Láh y de Muhammad, profeta libertario y violento.
“Qué bonito tu pelo”.

Stalin ordenó en 1930 que las mujeres pudiesen estudiar en todas las facultades universitarias y ejercer cualquier profesión.

“Qué cuerpo tan lindo tienes”.
Mieles que te llevarán a un fraude.
Aún vieja, con cinco mil doscientos años, intentarán colártela.

 

“…Demasiado puta para las santas, demasiado santa para las putas…” escribí hace casi veinte años.

Nada ha cambiado.

Pareciera que empeora con el paso de la Historia.
Con la inteligencia, todo empeora.
Miradas, gestos, corazonadas.
Sentimientos, desgarran lo imposible de la verdad humana.
Tal pareciera una catarata incoherente de vértigo y amargura.
Sólo es una Maldición, como canta el “Fado”.

Arrastro conmigo un cansancio de siglos.
Ni dormir lo sana, ni estar despierta lo empeora.
No es mío.

 

Ya desapareció la Hora, el Calendario y el Año.
Hace mucho que desaparecieron, para conturbarme, aún más.
Así ando por el Mundo, señalada, observada y cosificada.
Sé que sabes de qué hablo, compañera.

Sólo se hace el silencio cuando se expresa mi alma.
Y, de nuevo, como dice el “Fado”, “se hace un silencio que parece rezo, y cuando la escuchan parece religión, los que antes quisieron comprarla…”

 

Siete de Octubre, píldora a la mañana que no pude tomar ante el control estricto del gasto, tarde de añorar.

Turno de papel en máquina expendedora, timbre y, al final de la tarde, guitarra portuguesa.

 

Fotografía y texto originales de la autora. Para mi bisabuela Carolina Rodrigues, natural de Madeira, en la foto con dos de sus hijas.

“Misfits, Inadaptadas.”

 

 

 

Su amiga la miró apavorada cuando ella le espetó, “¡Somos unas marginales!”.

Tuvo que explicarle que a ellas, nadie las quería cerca porque eran mujeres acorazadas, que expresaban libremente su opinión, escribían lo que querían, sin interesarles réditos o fama.

Explicado esto, a su amiga le volvió la compostura al rostro.

 

Al poco tiempo hubo de pasar por el “Tribunal de los metros de Tela”.

Es aquel Tribunal formado por Guardianas de la Vestimenta, que se creen Feministas, y te acusaban, con sorna, en un nimio comentario sobre tus vestidos imperiales árabes, para poder decir luego que estás completamente loca, ante tu airada reacción.

Loca, y además terriblemente agresiva, con lo cual queda demostrada su Teoría de que “las Mujeres Transexuales no son Mujeres”.

 

Años atrás, el grupo de mujeres transexuales contemporáneas a los años ochenta y noventa que frecuentaba, la habían repudiado, por ser Feminista por Intuición y no encajar en sus patrones de violencia de género, asumidas en un remedo de femineidad atrasada y bárbara.

También fue rechazada por no saber ocultar sexo subrepticio, por no saber ser ladrona, o delincuente.

 

Tenía ella, la virtud, o el defecto, de sacar de sus casillas a cualquiera que pensara que tenía algo identificado y resuelto, en cuanto a forma de vivir, pensar o ser.

Por negarse a mutilaciones y operaciones que la convertirían en una “muñeca”, citando su propio argot…

 

¡Ay!

¡Cuánta muñeca despedazada encontró con el devenir de los años!

Ella, por aquellos días, ya protagonista de “Misfits” con Clark Gable, Marilyn Monroe y Montgomery Clift.

Desempeñaba su papel de loca, inadaptada y marginal a las mil maravillas, tras los años de largo “estudio”, que para su escuela hubiese deseado Lee Strasberg.

Cimbreó sus caderas machistas, por mor de “adaptarse”, y danzó su vientre árabe.

En pos de sentirse formar parte de algo.

Y ni aún así fue integrada.

Se despedazaba cada vez más, presa de una Marginalidad Inadaptante de Manual, cuyo principal síntoma era la Falta de Integración.

Pobre Freud, pobres misóginos y misóginas incapaces de ver en ella la Femineidad rocambolesca de Cibeles.

La Diosa de los sacerdotes eunucos, adornados con cintas amarillas y rojas, estridentemente atusados, sus voces histriónicas atronando cualquier conversación.

 

Doquiera que iba se sentía invadida por aquella estridencia.

En un tranvía.

En un restaurante comiendo en silencio sentada.

Sumida en un mar de confusión, eligió seguir sola sentada en su trono.

El Imperio lo exigía, y así fue ella educada.

Se entretuvo escuchando a la Orquesta Nacional Árabe, propia de su condición de Inadaptada.

En la soledad de su Imperio, saboreó el acoso, las denuncias y las adornó con más fotografías, grafismos y letras.

Tal era su venganza.

La de la Cultura.

Una Cultura elevada, rica, secular y ancestral.

El violín árabe contoneó su Córtex Cerebral, y en sutil frotamiento de cuerda con arco, la Cultura le bajó hasta el Hipotálamo.

Ésta vez sin lechos, sin amor desmadejado y sin tristeza.

La Cultura la poseyó, y se sintió al fin perteneciente, integrada, afín.

Por una vez, una más, como en “Misfits”.