«Mi Marruecos, de 1999 a 2024».

«Hassan II y su hijo Mohammed VI», foto de Mohammed Daradji.

En 1999 viajé por primera vez a Agadir, Marruecos. Fue el 1 de Julio de 1999 y acababa de regresar de una larga temporada en Brasil.

Volé en una avioneta ejecutiva desde Las Palmas, la opción más barata fuera del monopolio de «Royal Air Maroc» propiedad del estado, y visité la casa de la familia de mi profesora de árabe en la Universidad. Me recibieron de manera muy hospitalaria, hasta que empecé a hablar de política, y no supieron si sentarme en el salón de los «Hombres» o en el de las «Mujeres«.

Llegado ese punto decidí irme a un hotel para no incomodar y comprometer más aún a la familia. Me llevaron al Barrio de Talborjt, que atesoro en mi retina antes de ser gentrificado. El Cine, la Estación de «Tobús» (así llaman en dariÿa al Bus), los niños y niñas, las mezquitas de barrio, las tiendas de telas, panaderías y cafés de barrio.

Necesitaba estar sola, después de tanta familia, tantos saludos y tanta política. Recuerdo que el primer día que salí del hotel a tomar un café no era capaz de levantar la cabeza, la situación impone a una mujer  que viaja sola.

Conocí el «magasin» de un hierbero Aziz, que me indicó cómo sortear el acoso sexual callejero pasando a ser acosada sólo por él, ser robada por turista, y más.  Conectamos rápido por el Tarot, que yo usaba para meditar y él para hacer «gri-grí» (nombre dado a la Brujería) a las mujeres y a sus maridos, y así alimentaba a su familia.

Dos días antes de mi regreso, murió Hassan II. La televisión empezó a emitir unos programas especiales en los que una voz rezaba y una imagen de una paloma volaba, exactamente la misma paloma de los billetes de 100 Dirhams.

Regresé a Tenerife cargada de joyas de plata artesanas, telas amazighs y mucha música «Tashelhit» en casetes.

Me divorcié y me deprimí. Decidí entonces irme de nuevo a Agadir, para quedarme una larga temporada y tantear las posibilidades de vivir allí.

Conocía a un tipo que me llevó enrolada como tripulante en un yate de un mafioso inglés desde Tenerife a Gibraltar. De ahí a Algeciras, ferry y llegar a Tánger una de las ciudades más caóticas, sucias y ruidosas que he visitado en toda mi vida.

Tren nocturno hasta Marrakesh, acompañada por muchas Mujeres Contrabandistas con su carga acumulada bajo una Chilaba enorme, punto más al sur a dónde llega el ferrocarril, y desde allí un «Tobús» hasta Agadir.

Asistí al primer discurso de Mohammed VI, cuya fotografía al lado de su hermano presidía ahora todos los bares y tiendas, reemplazando a la de su padre Hassan II o colocada al lado ante la incertidumbre. La «Fiesta del Trono«

Incertidumbre de una Dictadura Militar de «años de plomo», chivatos, vigilantes de la moral, policía turística que impedía a extranjeros estar con los marroquíes u obligaba a pedir un permiso para hacerlo.

La prostitución era sórdida y la más abundante que había visto en años. Mendigos y Mendigas, Ladrones, Rateras, fumadores/vendedores de Hashísh, Niños y Niñas de la Calle, componían el mosaico presidido por una mujer policía que dirigía el tráfico desde una rotonda elevada.

En su primer discurso Mohammed VI aseguró querer acabar con esa dictadura a su manera, y «convertirse en garante de los Pobres».

Ordenó reconocer el asesinato de Ben-Barka, y todo volvió al mismo cuchicheo de putas, rateros, chivatos y demás. Se abrió una «Comisión de Investigación de Crímenes en los años de plomo» de su padre, Hassan II y se dieron algunas indemnizaciones.

En el año 2.000, vista la imposibilidad de habitar semejante espanto volví a Canarias, viajé a Brasil de nuevo, y sucedió lo narrado en el anterior post «Nosotres les Sin Tierra«.

Recuerdo que me fui de Agadir un día de tormenta, rayos, relámpagos y lluvia que saludaron el coche oficial de Yassir Arafat, llegado para la «Cumbre Al-Quds» celebrada allí, que nos saludó con la mano desde el vidrio blindado. Era el año 2.000, hoy Marruecos a cambio del reconocimiento de la «marroquinidad del Sáhara Occidental» ha firmado los «Acuerdos de Abraham´s» por los que establece un compromiso de amistad y cooperación con Israel y reconoce a Jerusalén, de quién es garante de facto presidiendo el «Comité Al-Quds«, como Capital de Israel durante la administración norteamericana de Trump.

Ya en el primer viaje me contaban de musulmanes que iban a rezar a las playas, para «condenar los bikinis» de las Turistas. Se sucedieron en estos 24 años varios gobiernos «islamistas» siempre bajo el paraguas del  «Majzén» (La Tienda, El Almacén), camarilla mafiosa que habita los alrededores del Rey, recibe prebendas y forma parte de su Clientela más acaudalada.

Las ratios de pobreza aumentaron con vértigo durante el gobierno del «Rey de los Pobres» autodeclarado por Mohammed VI. La Educación cayó por un precipicio. Acumuló una fortuna personal ingente, se casó, tuvo hijos, y desapareció su mujer Salma Benali. El Rey enfermó, dicen que por la disipación y las malas compañías, mientras le afilaron las orejas a su hijo Mouley Hassan y comenzó a salir en las fotos junto a su padre el Rey, como en la Era de Plomo

«La muchacha que se casa». 即将结婚的女孩。

«La Mujer leyendo con gata», collage, ilustración lápiz acuarelable-2023 Todos los Derechos reservados a la autora.

 

La niebla le dio la señal de que era hora de pensar. Pensar en «Kuei-Mei«( 即将结婚的女孩。) «La muchacha que se casa», hexagrama 54 «I Ching». Se narra la posición de «la hermana menor» supeditada a la figura del «hermano mayor».

Describe la posición de Concubina, Amante, y las relaciones no formales o «libres», la decisión que se toma «libremente». Todo lo libremente que una Mujer puede decidir al unirse a un «Rey», ya casado y con lazos familiares. Dice el texto que «la Concubina de un Rey es Reina», siempre que sepa cuál es su lugar y que nunca será una esposa formal».

El hexagrama 54 regula las relaciones, pero no entre iguales y advierte que este tipo de uniones son siempre nefastas para las Mujeres, a no ser que esté usted dispuesta a asumir un rol de «Amante». Estará usted supeditada a un rango inferior, pues no forma parte de la «familia».

Episodio 1.

Una familia mauritana se sienta en el mismo café que yo. Ellos con su «etiqueta islámica», padre con gorra de «béisbol», madre con melfa e hijo con bolsas de compras de la tienda «El Ganso«.

La madre me mira con ansia de mi Libertad. Al hijo se le salen los ojos de la órbita mirándome. El padre observa mi melfa  que no me cubre el cabello, largo, rizado de un color cobrizo escandaloso y recogido en lo alto de la coronilla. Observan los tres mis uñas color coral, joyas de plata café y cigarrillo.

El padre chismorrea sobre mi con el hijo, la madre baja la mirada usando el «purdáh» islámico, el Pudor. Llevo sandalias plateadas que muestran mis dedos de los pies con uñas pintadas. Soy impúdica.

Toda yo soy un desafío a la norma del «Purdáh».

Wilhem, en su traducción del «I-Ching» comenta que «la tradición china logró resolver este dilema (del Concubinato) advirtiendo a las Mujeres hace siglos, cosa que la cultura euro-occidental no ha logrado».

Por mi rechazo a las relaciones románticas, he aceptado a lo largo de mi vida ser la «Concubina» de algún que otro «Rey», y es cierto que fui Reina, dentro del «Harén», que creé para mi misma en este caso. No fue ni mejor ni peor que otras relaciones formales que hubo en mi vida. Tenía ventajas y desventajas, y cuándo no me compensó, eliminé mi parte del «trato», sin esperar la respuesta del «Rey»

Tal Libertad hizo que holgaran despedidas ni «separaciones» dónde nunca hubo una unión real ni formal, no son aplicables.

Me sentí libre de entregar mi cariño, mi honestidad e inteligencia y exigí lo mismo a la otra parte, en contrapartida. Cuándo hubo descompensaciones en cualquier sentido nombrado antes, se acabó tal relacionamiento.

Y llegamos al punto de pensar que hasta este tipo de relaciones de «concubinato», citadas en la jurisprudencia e incluso en el matrimonio civil español de 2024 que obliga a la fidelidad entre los conyugues cuyo incumplimiento garantiza el divorcio, están reguladas ancestralmente y quienes aceptan tales tratos también tienen normas que cumplir.

 

La piel de la paquiderma y el “Ankus”. La niña y el Violador.

Cuando era pequeña, los primeros recuerdos son de su temprana infancia, el abusador la iba cercando.

Merodeaba,  era un depredador. Quiere ejercer el Poder y es esa, exactamente esa, la acción que le produce placer.

Amedrentar a alguien desvalido, una niña lo es, para satisfacer su apetito libidinoso.

Cuando un elefante es una cría, pesa alrededor de 120 kg. y la persona encargada de domarlo, “Mahouts” en la voz hindú, usan un “Ankus”, o Focino, una barra de metal en forma de pica que le clavará en los hombros, cuello u orejas para que obedezca.

El abusador la amenazaba con “contarlo todo en su colegio” si no accedía a la violación y la niña sin siquiera imaginar que de hacerlo él sería el más perjudicado y que es mentira, se aterroriza.

Primer golpe de Ankus en la piel de la joven paquiderma.

Pasará el tiempo y el abusador desplegará una suerte de  “poder de seducción” basado en el Terror “a que se sepa”, y el incipiente placer sexual infantil, sin conocimientos y puramente instintivo, para hacer sentir culpable a su víctima.

Esta será la segunda herida de Ankus en la piel de la criatura paquiderma, determinando así “la doma”.

Dadas tales prácticas se perciben en la sexualidad de las víctimas de abuso sexual infantil una concepción de la práctica del sexo como algo violento y sucio.

Las consecuencias durante la infancia son fracaso escolar, comportamiento retraído,  miedo o animadversión al abusador, con el que tendrá que convivir dado que el 90 % de los abusos infantiles se dan en el entorno familiar, irritabilidad, ansiedad, insomnio y anorexia.

En la adolescencia las personas abusadas en la infancia suelen tener unas primeras relaciones sexuales insatisfactorias y se observa el inicio de consumo de alcohol y drogas a muy temprana edad en la mayoría de ellas.

El abusador-domador habrá infringido tantos golpes de Ankus  en la piel de las crías que de mayores reaccionarán con violencia, ira y agresividad ante relaciones sexo-afectivas o emocionales. Han sido las victimas domadas para que su relación con el sexo sea de “sumisión/dominación” y es en la mayoría de casos una herida, con la que se puede aprender a convivir, pero incurable.

En mi propia experiencia es un asunto tratado con la psicología y la psiquiatría, perdonado pero jamás olvidado, y que me hace una persona con un grado de desconfianza superior, por fuera de la gráfica de cualquier perfil de la personalidad trazado por profesionales, de cualquier persona común, que no ha sido abusada. Esto es 300% en desconfianza frente a 15% de las personas cuya infancia ha transcurrido sin abusos sexuales.

No han sido “domadas” con pinchazos sangrantes de Ankus en la piel y pueden tener relaciones sexo-afectivas funcionales y satisfactorias.

Volver a reseñarles que el 90% de los Abusos  Sexuales Infantiles se dan en el ambiente  familiar o escolar, el más próximo a alguien que es supervisado y cuidado por mayores.

Agradecer la construcción del símil a la película “Agua para elefantes”, basada en la novela homónima de la canadiense Sara Gruen.

Datos estadísticos sobre Violencia sexual contra menores en España.

https://geoviolenciasexual.com/violencia-sexual-contra-menores-en-espana-datos-y-tendencias/

Santa Cruz de Tenerife, Gentrificación y destrucción del Patrimonio de la mano de tres nazis.

No iba a ser Santa Cruz, “la muy noble, leal e invicta”, y que presume de haber derrotado a Nelson y perder la oportunidad de ser las “llanitas” del norte de África, la que se librara del ataque furibundo del Neoliberalismo y la destrucción de su centro histórico. La Gentrificación avanza promovida por los planes de urbanismo ilegales.

El último atentado es la invasión del antigua fábrica de tabacos y después cine “Victoria”, para construir un supermercado especulador, que quiere derrotar al “gobierno social-comunista” a fuerza de subir precios y joder  a las consumidoras que se lanzarán furiosas a engrosar el ruido nazi de las redes.

El Alcalde, amenazó a unas vecinas con una multa salada por poner unas plantas con macetas en una calle del centro que no tiene ni una sola papelera, por “invasión del espacio público patrimonial”.

Este año no izó la bandera LGTBIQ+ el Día del Orgullo alegando que “le prohibieron izar la bandera canaria de las siete estrellas verdes”.

No deja de tener guasa, por no lanzarnos a quemar el consistorio, y todos y cada uno de los monumentos de exaltación al Dictador nazi Francisco Franco, mientras deja caer envueltos en mallas a modo de advertencia, casas de fines del siglo XVIII y XIX.

Invadir el espacio público patrimonial fue pagar una fortuna a los arquitectos suizos “Herzog & de Meuron”  por destruir el entorno de la “Plaza de España”, que consta de una charca  llena de colillas y cucarachas muertas, sin antes derribar el conjunto escultórico de exaltación nazi mal llamado “monumento a los caídos por España”.

S/W Ver: 85.97.80R

Igual de antidemocrático resulta que la ciudad que nació con la Conquista, fundada por el adelantado de la corte Fernández de Lugo, con vocación marinera le haya sustraído a la ciudadanía el acceso al mar que no se puede pisar hasta 7 kilómetros después de la citada plaza.

Acompañado por 3 concejales nazis y el apoyo de la comparsa del Partido Popular, el Alcalde y varias asociaciones franquistas han judicializado el cumplimiento de la “Ley de Memoria Democrática” denunciando en varias ocasiones el “Catálogo de Vestigios Franquistas” elaborado por la Universidad de La Laguna U.L.L. nada sospechosa de ser “comunista”.

 La conversión de todo lugar habitable en “vivienda vacacional” sin elaborar una ordenanza que regule tal actividad, entrando en fraude de ley por colaborar en evadir el pago de impuestos de tal negocio al Ministerio de Hacienda.

Esta situación hace imposible encontrar una vivienda habitable a un precio razonable.

La invasión de europeos “nómadas digitales”, promovida por la nefasta política de la ex Consejera de Turismo del gobierno canario, han terminado de copar todo el espacio, expulsando a la gente trabajadora, canaria o foránea, a los cinturones de marginalidad situados en la periferia de la ciudad.

¿Qué será del espacio periurbano que alberga el último rebaño de cabras en el Barrio de la Salud, en la zona que conecta  este municipio con el de La Laguna?

Texto y Fotografías originales de la autora.

La Voz Equivocada.

Lanzaba días atrás una miembra del Consejo de Estado del “Reino de España”, tras prologar un libro que versa sobre “las maldades de las gentes transgénero y otras variedades/diversidades”, a veces vulgo “queer”, la idea manida del “Cuerpo Equivocado”.

No me extenderé sobre este asunto pues pueden revisitar ustedes la polémica en los “diarios” y “redes sociales” españolas.

En mi charla cotidiana con una persona de mi intimidad, comentando este y otros avatares de nuestra maltrecha vida, sumen pandemia y guerra, surgió la “voz equivocada”. Excluyan nuestras vidas que son de lo más rutinarias, y en las que a ambas nos gusta especialmente el sonido de los gatos cuando beben agua en completo silencio.

Y sí, nuestras “voces equivocadas” no tienen nada que ver con el género ni el sexo, más bien es con la cuestión de Clase, que ya sé que les aburre por “dogmática”, poco o nada “nihilista” y todos los demás adjetivos que se atribuyen hoy día al análisis marxista de la sociedad.

Mi bisabuela y mi abuela, también mi madre, eran “voces equivocadas” hablaban y no se las tenía en cuenta. Tuvieron hijas e hijos con “voces equivocadas” de pobres, y nietas bisnietos y tataranietas con “voces y cuerpos equivocadísimos” una vez superadas las hambrunas de cada época pasada.

Nosotras ya no teníamos hambre. No nos gustaba comer. Y seguíamos siendo Pobras. Las “oscuritas” de un país que lleva el Racismo en el ADN.

Queríamos devorar el mundo y la vida, pero, de nuevo vivíamos vidas equivocadas, en países equivocados, con sociedades completamente equivocadas en las que el Poder siempre residiría fuera de nuestro alcance.

Nuestra idea equivocada de la igualdad, del justo reparto de la riqueza, y de la conciencia de grupo, de formar parte de algo superior a nuestra individualidad, no cabía en “Instagram”.

(Inserte aquí su escaso conocimiento de la Obtención de la Plusvalía, acuñada por Karl Marx, si fuera mucho escriba su propio artículo)

No queríamos debates que habíamos perdido de antemano, y nos limitábamos a analizar, por nuestra sanidad mental, los acontecimientos.

Nos asaltó el “logro” de que una joven transgénero fuese operada de la voz, para así dejar de sufrir el oprobio, los insultos y agresiones contra su “cuerpo equivocado”.

Lo comenté con dos personas transgénero de mi edad, entre 40 y 60 años, y una me dijo que la cuestión de la voz equivocada era transfobia, y la otra se sorprendió por la alegría que le había dado superar ese trauma y aceptar su voz, equivocada, y cuanto placer personal le proporcionaba este logro.

Todo se silenció por el “bien del Pacto de Izquierda” y la amenaza de la “llegada del Fascismo” al gobierno.

Un Fascismo que subyace desde antes de la Esclavitud atlántica, que reside en el Poder profundo, el real. El Dinero.

Siempre dará igual que te hablen de “democracia” una versión del esclavismo de la Grecia clásica transportado hasta el carrito de tu supermercado, regado con dioxina, cáncer y huesos de años ruines.

Huesos que arrastran siglos de hambre y de maltrato, de trabajo forzado, de partos en condiciones precarias, de tu bisabuela y la mía.

No te preocupes, siempre encontrarán algo equivocado en ti y en tu vida.

Nunca serás lo suficientemente rubia o blanca, occidental o de buen apellido, regado con una buena herencia.

Lean el Capítulo dedicado al Fascismo y al Totalitarismo en sus manuales de Ciencia Política, allí encontrarán poca información, muy difusa y en un lenguaje hecho incomprensible, a propósito.

Será lo único que les vuelva a repetir que sus voces están equivocadas, que viven ustedes en cuerpos equivocados, que hay que “desahuciarlas” de sus techos, porque eligieron ustedes una posibilidad equivocada.

Esta voz equivocada les da la bienvenida al caos programado. Adivinen por quién.

Las chicas “Bacurau” del norte de África contra el Far-West.

El sentimiento de pertenencia es lo que hace que nos sintamos identificadas con personas, hechos, políticas e incluso gestos humanos.

Pertenecemos porque nos identificamos con aquello que nos “emparenta”, el sentimiento tribal, fundamentado en la articulación de un parentesco extenso, que logra convocar a una Tribu.

Mucho ha disertado la Antropología sobre las “Tribus Urbanas”, después de desembarazarse del cinturón de hierro de las Razas, biologicismos, higienismos, y demás aspectos mezquinos que no la dejaron evolucionar hasta los días de ayer y hoy.

 

Se preguntarán qué diablos es «Bacurau».

Es el título de un film dirigido por los brasileños Kleber Mendonça Filho y Juliano Dornelles y ganadora del Premio del Jurado de Cannes en 2019.

Se corresponden con Bacurau, una estética, un pensamiento político y un sentimiento de “pertenencia” que me identifica como “bacuraense” sin pasar por las “cantinas con vaqueros, whisky y chicas en corsé” del Hollywood de nuestra infancia.

En una escena de la película, unos extranjeros pasan por Bacurau y la mujer pregunta: “¿Cómo se le dice a la gente que es de Bacurau?”, esperando el gentilicio adecuado como respuesta, y un niño desde su ingenuidad responde de manera inmediata: “personas”

El film comienza situando el “tempo” en algún lugar de aquí a unos años, que por lo tanto no existe, o puede que exista.

Tenemos imágenes en la retina que conforman nuestro pensamiento y nos producen sentimientos de pertenecía o de lejanía, que nos identifican según nuestras afinidades con lugares y hechos, o que por “desemejanza” nos hacen entender “lo que no somos”, a lo que no pertenecemos.

Educadas, las “chicas” del norte de África, en el discurso de Fátima Mernissi, que planteaba quienes queríamos ser, Simbad o el Cowboy, nos convertimos en las “chicas Bacurau” al rechazar la figura violenta armada del Cowboy y abrazar al Simbad viajero que aprovechaba los monzones para viajar desde Basora a islas inexistentes desde las cuales regresar cargadas de tesoros y preciosidades.

Somos raridades marginales que nunca se identificarán con la chica desvalida que rondaba el “Saloon” del westernhollywoodense”, a merced del vaquero de turno y su humor, pendencia o tamaño del revólver.

Las chicas Bacurau del norte de África reconocemos como única frontera lo rancio del Pensamiento Único, la Blanquitud extrema y el rechazo más absoluto a una violencia en la que hemos crecido y a la que hemos desterrado con la palabra.

Mestizas, orgullosas.

No se trata entonces, de conformarnos con lo que los vaqueros nos quieran dar, sea malo o bueno, sino que hemos subido a lomos del camello digital para seguir la estela de los viajes de Simbad que leímos en «Las 1001 Noches».

Viajamos y defendemos Bacurau, esa Matria ilusoria en la que muchas de nosotras nos sentiremos a refugio de vaqueros violadores, pendencieros a los que hemos puesto unos límites que nos pueden llegar a convertir en muy elocuentes, si se atreven a cruzarlos.

Bacurau”: https://es.wikipedia.org/wiki/Bacurau

Fátima Mernissi: ¿El Cowboy o Simbad (…)

¿El Cowboy o Simbad? ¿Quién vencerá en la globalización? Por Fátima Mernissi.

El Mito del Estado del Bienestar.

Acostumbramos a leer comparaciones entre los países nórdicos, o escandinavos, con nuestras realidades, diversas, usándolos como paradigma de lo que desearíamos para nuestras vidas. Lo hacen los medios de comunicación, la opinión pública e incluso algunos Partidos Políticos.

Suecia tiene 10,23 millones de habitantes, Noruega 5,328 millones de habitantes, Finlandia 5,518 millones de habitantes y Dinamarca 5,806 millones, según datos del Eurostat y el Banco Mundial en 2019.

A partir del final de la 2ª Guerra Mundial se optó por una forma de Estado que contentara a la masa trabajadora de estos países para no volverse “comunista”, a excepción de Finlandia satélite político de la Unión Soviética hasta la década de los 80.

El “experimento” duró poco y se limitó a la década entre 1950 y 1960, entrando estos estados en una vorágine de burocracia que creó guetos obreros, que obviamente no vivían como las clases acaudaladas que continuaron viendo crecer sus fortunas y poder.

En la década de 1960 hasta 1970, se podía ya ver con claridad el fracaso del tal “Estado del Bienestar” embrollado en recortes presupuestarios, millones de formularios e impuestos altísimos para salarios no muy altos, si no los comparamos con otras economías.

Llegada ya la década de 1980 a 1990, sin la amenaza que servía de contrapartida a la clase trabajadora a la hora de negociar que forma de vida deseaban tener, de la Unión Soviética desmantelada entre 1989 y 1990, entraron los países nórdico-escandinavos en el agujero del Neoliberalismo siguiendo al Eje Reagan-Thatcher.

Entre los países del Mediterráneo europeo comencemos por Portugal, con 10,28 millones de habitantes y Grecia con 10,7 millones, mismas fuentes mismo año. Entremedio de estas dos naciones pequeñas en extensión territorial tenemos a Italia, con 60,76 millones y a España con 46,94 millones de habitantes. Portugal, Grecia y España fueron los últimos países en incorporarse al entonces Mercado Común Europeo (C.E.E.) en la década de los 90. y recién salidos de dictaduras militares en la década de los 70.

En Europa Central tenemos a Alemania, con 83,02 millones y Francia con 67,06 millones de habitantes. Ambas con economías subvencionadas tras el final de la 2ª Guerra Mundial y con un desarrollo capitalista organizado, vivido en unas democracias relativamente aceptables.

Tras el final de la 2ª Guerra Mundial los estados europeos vieron como “deseable” la importación de trabajadores de sus ex colonias por la escasez de mano de obra que había dejado el colapso tras la guerra, Marruecos, Argelia, Grecia, Turquía España e Italia, entre otros, aportaron estos “cupos” migratorios.

En la ribera sur del Mediterráneo tenemos a Egipto, con 100,4 millones, Argelia con 43,05 millones y Marruecos con 36,47 millones de habitantes y con desarrollos diversos en su etapa post-colonial. Con gobiernos de partido único, cuando no de claro neo-absolutismo, dependientes del F.M.I o de los Fondos Soviéticos dependiendo del signo del tiempo y gobierno en el Poder.

Imaginen el mapa que les he construido de manera grosera, al no incluir la totalidad de cifras y países entre uno y otro extremo, y díganme ahora si en ese mapa imaginario las cifras de escolarización, analfabetismo, o de renta per cápita son, o incluso pueden ser comparables.

Sólo ignorando procesos históricos y culturales de manera grosera, como mi “mapa imaginario”, se podría comparar y exigir un “Estado del Bienestar” para regiones tan diversas en todo aspecto, una vez llegado el colapso de la economía industrializada y del propio Capitalismo como lo conocimos durante el siglo XX.

Un pequeño detalle. Los “turistas nórdico-escandinavos” que comenzaron a llegar a España en plena Dictadura Franquista, podían venir de vacaciones, un “derecho laboral” logrado a base de convenios sindicales, por la miseria reinante en nuestro país, los miserables salarios del incipiente esquema turístico español y la total ausencia de sindicatos libres o la simple negociación de Convenio Salarial alguno, prohibido expresamente por las Leyes Franquistas.

Otro “pequeño detalle”, sobre aquel Partido Comunista de Italia, el mayor de un estado europeo, al que votaban millones de personas, trabajadoras industriales, con un fuerte movimiento sindical en la década de 1960 y 1970. ¿Dónde está, lo saben?

Francia y Alemania con escenarios mixtos entre lo nórdico y lo italiano en cuanto a participación sindical y política con un cierto grado de “bienestar” basado en la redistribución de la riqueza a través de los impuestos, pues no existían dictaduras al ser derrotadas en la 2ª Guerra Mundial.

No es mi intención reventar nuestro “mapa imaginario” con la entrada de países y cifras de Latinoamérica, para que continuemos en la “burbuja de pensamiento” que flota como reivindicación de las clases populares desde la irrupción de las políticas Neo-Conservadoras del Eje Reagan Thatcher.

Y ahora díganme donde coloco a Egipto y sus más de 100 millones de habitantes y como les explico a la ciudadanía egipcia que es el Estado del Bienestar cuando hemos “sustituido” a la Ciudadanía por Consumidores de Productos fabricados en China…